Por DIEGO OTERO PRADA
Ahora que se discute tanto sobre la gasolina (corriente y extra) es oportuno conocer la evolución de sus precios desde que entró en funcionamiento la refinería de Barrancabermeja en 1921, con una capacidad de 1.500 barriles por día, y que comenzó produciendo cuatro derivados: combustóleo, gasolina, ACPM y kerosene.
En el cuadro 1 se presenta de 1921 a agosto de 2023 del precio de la gasolina corriente en Colombia, en pesos por galón, así como las tasas de crecimiento anual en precios reales y corrientes. Una primera mirada nos muestra que se dieron ocho incrementos reales anuales mayores a 30%, por orden de tamaño, así: 1980 (73,97%), 1976 (63,66%), 1965 (59,03%), 1999 49,98%), 1979 (42,03%), 1970 (38,34%), 2023 (37,03%) y 1991 (30,32%).
Obsérvese que cuatro de los mayores aumentos se dieron en los años de los choques petroleros de los 70 y 80.
Ahora, en el gobierno de Gustavo Petro, de octubre de 2022 a agosto de 2023 se ha producido un incremento de 46,72% corriente (de 9523 a 13973 pesos el galón), y real de 34,7%, el séptimo más alto en toda la historia. Pero si se siguen los incrementos que propone taxativamente el ministro de Hacienda, de 600 pesos en septiembre y octubre, se llegaría a $15.173 y un incremento real de 50%, el cuarto más alto en 102 años, el mayor incremento desde 1980. Esto no deja de ser sorprendente en un gobierno que se dice del cambio, pero que sigue las políticas del FMI en este aspecto y en otros.
Las fórmulas de los precios de los combustibles
Hasta diciembre de 1998 el precio de la gasolina se fijaba según precios internos. En mayo de 1997, en el informe de la visita que hizo el Fondo Monetario Internacional (FMI) a Colombia se sugirió cambiar a precios de referencia internacionales. Como se sabe, esta clase de sugerencias son órdenes. Es así como el ministro de Minas y Energía de la época, Juan Carlos Valenzuela, produjo la Resolución 8 2439 de diciembre 23 de 1990 que adoptó las recomendaciones del FMI, lo cual ha sido la política seguida desde entonces, incluyendo al gobierno del cambio de Gustavo Petro.
No confundir gasolina corriente con extra
En declaraciones públicas ante los medios de comunicación, analistas y el mismo Gobierno acostumbran a confundir gasolina corriente con extra, como si fueran una sola. La gasolina extra la consumen los ricos y mucho carro oficial, y en las encuestas que se realicen hay que distinguir bien este tipo de gasolinas, porque se termina con conclusiones equivocadas, como que la gasolina corriente se consume en casi un 50 por ciento por los ricos, lo cual es por completo equivocado.
Cuadro 1 Precios de la gasolina regular de 1921 a 2023 en pesos por galón
Fuente: estadísticas petroleras, informes anuales de Ecopetrol y el ministerio de Minas, UPME estructura de precios de los combustibles, Otero, P. (2023) Historia del Complejo petrolero de Barrancabermeja.
Gráfico 1 Precio de la gasolina corriente en pesos por galón de 1921 a 2023
Fuente: cuadro 1
Conclusiones
Los incrementos más altos en los precios de la gasolina corriente se dieron en los 70 y 80, debido el al aumento en los precios internacionales del petróleo por el primero y segundo choques petrolero de 1973 y 1979, que pasaron a Colombia de exportador de crudo hasta 1975, a importador hasta 1985, por una política equivocada de exploraciones.
De 1921 a 2023 se tienen ocho incrementos reales de los precios con porcentajes mayores a 30,0%, dentro de los cuales se encuentra en el séptimo lugar los producidos por el gobierno de Gustavo Petro hasta agosto de 2023. Si se producen los aumentos anunciados por el ministro de Hacienda, se pasaría al cuarto lugar.
@DiegoOteroP
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