La novela de la moción de censura de Karen Abudinen no ha terminado. La semana pasada se votó la moción de censura tras haber renunciado a su cargo, y hubo 56 votos por el sí y 30 por el no, cuando el número mínimo de votos para tomar una decisión era de 86 votos.
Esto generó una intensa polémica, pues había 143 representante registrados en la sesión pero apenas 86 votaron, lo cual despertó la indignación de la oposición.
Una de las convocantes a la moción de censura, Katherine Miranda, del Partido Verde, instauró una tutela contra la sesión en la que hubo la votación, porque según la congresista se cometieron no una sino cuatro irregularidades.
Vale recordar que durante la moción la representante Katherine Miranda le preguntó a la ministra sobre el destino del dinero adelantado. “Se ha dicho que los 70 mil millones de pesos salieron del país. La plata no ha salido del país de manera legal, esa plata no está en Estados Unidos de manera legal ¿Dónde está la plata ministra? Esa plata no aparece. Invito a que hagamos un control real, usted sabe ministra que esa plata no salió”.
La pregunta nunca tuvo respuesta. Ahora Miranda sabe que si obtendrá respuesta a su acción de tutela y ella está muy optimista. Miranda habló con nosotros en El Unicornio.
Lo primero que explicó fueron las razones por las cuales interpuso la tutela.
“Fue principalmente por cuatro violaciones claras en medio de la votación de la moción de censura. Primero, estuvo mal desde la misma sesión, porque la Corte Constitucional en la sentencia 242 enfatiza que para la toma de decisiones referentes a actos legislativos, leyes estatutarias, de control político y de la moción de censura, es obligatoria la presencialidad. Y nosotros en el Congreso de la República de manera presencial, más o menos hay un aforo permitido de 100 congresistas en la Cámara y salvo los de oposición había uno de cambio radical, uno de La U, uno del Liberal y uno del Centro Democrático, no había nadie más. Hay se está desconociendo el mandato de la Corte Constitucional”.
Continúa la congresista: “la ley quinta en el artículo 123 en el numeral 4 dice que el número de votos debe ser igual al número de congresistas presentes en la respectiva corporación al momento de votar y con derecho a votar. Si el resultado no coincide, la elección debe ser anulada por el presidente y se ordena su repetición. Vimos claramente que hubo 143 congresistas que levantaron la mano para su asistencia, es el número oficial que hay en el registro de asistencia, de los cuales votaron solamente 86; en plataforma había 57, para lo único que fuimos convocados y no votaron, se tenía que repetir esa votación porque los números no coincidieron.
Miranda explica que las únicas excusas para no votar es que haya una autorización del presidente, explícita, donde se le diga que a un congresista se le da permiso de ausentarse durante la votación, por alguna razón. Ningún congresista tuvo autorización para ausentarse por parte del presidente de la sesión de manera explícita, ni tampoco se presentó un impedimento para que no se votara. Por eso dice ella que “a todas luces la votación está viciada”.
“Otra de las irregularidades es que nosotros presentamos varios recursos de apelación para que se votara llamando a lista uno a uno, y eso no pasó. Nosotros no solo lo hicimos de manera verbal sino también escrita y se hizo caso omiso a eso. Por eso presentamos la tutela y esperamos que en un término de diez días el juez determiné frente a la acción”, indicó la representante.
“La tutela a lo que le apuesta es que se le ordene a la presidenta de la Cámara a fijar una nueva fecha y hora para que se repita la moción de censura porque se incumplieron esos pasos. Y dos para que se repita esta votación se tiene que citar de manera presencial, cumpliendo los requisitos de bioseguridad, pero también cumpliendo el mandato de la Corte Constitucional”, señala.
“Nosotros lo que estamos diciendo es por qué cuando el Congreso tuvo función electoral para elegir a la presidenta de la Cámara fue todo el congreso y la votación se hizo de manera presencial con los más de 170 representantes de la Cámara sabiendo que tenemos un aforo de 100 personas. Y cuando se hizo la moción de censura no había una presencialidad en el Congreso que ni siquiera llegaba al 10 % cuando la Corte pedía lo contrario.
Por último, Katherine afirma “La tutela va dirigida en contra de la presidenta de la Cámara (Jennifer Arias), porque ella es la que tiene la potestad para determinar los recursos que nosotros presentamos en el momento de la citación, ella es la que define como se tiene que hacer la citación, entonces ella es la que tiene esas irregularidades, particularmente es contra ella”.
Asegura que es la primera vez en la historia que se interpone una tutela a una votación de una moción de censura y dice con el mayor optimismo. “Te lo juro que tengo todas las esperanzas de la vida que el juez fallará a su favor”. En 10 días hábiles (antes que termine septiembre) se conocerá la respuesta y sabremos si Abudinen, Centros Poblados y los 70 mil millones vuelven al escenario de la vida nacional, porque ya en este país nos estábamos olvidando del tema.