Vamos a salvar a Avianca.
Pobrecitos, se quebraron.
Dicen unos, la esquilmaron
en maniobra cojitranca.
Las garantías con la banca
siempre serán exigentes,
por ello es muy conveniente
que el gobierno colabore
y, con vaselina, embole
la deuda al contribuyente.
¿Cómo así, era tan urgente
regalar esas platicas?
nos cogieron de maricas
sin garantía suficiente.
En un préstamo decente,
al dinero que es de todos,
no pueden echarle lodos,
cubriendo huecos ajenos
aparentando ser buenos
y untados hasta los codos.
En conclusión, -ya lo explico-
esa plata se perdió.
El gobierno se pifió
dándola toda al más rico.
Eso es una ley con mico,
que desigualdades tupe,
¡oh, virgen de Guadalupe!
da cobijo a los pequeños,
que el Estado tiene dueños:
son los compinches de Duque.
GERARDO MARTÍNEZ MARTÍNEZ
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