Por DIEGO OTERO PRADA
Como hemos afirmado, parecía que el 28 de abril se había llegado al pico de la tercera ola, con 17 616 contagiados diarios. Pero esto se vio suspendido el 23 de mayo por un crecimiento acelerado de los contagios, hasta que se llegó a 26 823 infectados diarios el 6 de junio, tendencia que se quebró días 7 y 8 de junio, hasta alcanzar 25 597 en este último día (gráfico 1).
Se quebró de nuevo la etapa ascendente, ¿o son solamente unos días de decrecimiento? Hay que esperar una semana más.
De 33 regiones, al 8 de junio tres estaban aún creciendo, que son Bogotá, Valle y Santander. El resto de los 30 departamentos, la mayoría han presentado dismnuciones en los contagiados en los últimos tres días, lo cual es muy buen indicio.
Bogotá presenta un porcentaje muy alto de infectados
Bogotá tuvo un cambio dramático el 23 de mayo después de varias semanas de relativa estabilidad de casos diarios: entre 4000 y 5000 hasta el 22 de mayo, que aumentaron a 8000 el 30 de mayo y se impulsaron sobrepasando la barrera de los 8000 del 31 de mayo al 4 de junio, y desde el 5 de junio la cifra de 9000 para llegar el 8 de junio a 9540, que equivale al 37 por ciento de todos los contagiados diarios, porcentaje que nunca había ocurrido desde que comenzó la pandemia el 6 de marzo, en que normalmente variaba alrededor de 30 por ciento (gráfico 2).
Gráfico 1 Evolución del Covid-19 en Colombia del 1 de abril al 8 de junio de 2021
Gráfico 2 Evolución del Covid-19 en Bogotá del 1 de abril al 8 de junio
Valle del Cauca y Santander siguen en la tercera ola en la etapa ascendente
Adicional a Bogotá, el Valle del Cauca y Santander son los otros dos departamentos en que los contagiados diarios siguen en ascenso. Estas tres regiones explicaban el 8 de junio el 51,6 por ciento de los infectados (gráficos 3 y 4).
Santander es muy especial porque venía hasta el 25 de enero de 2021 con menos de 550 contagiados, que bajaron a menos de 200 el 20 de abril. A partir de esta fecha los casos crecen exponencialmente llegando a casi 2000 el 8 de junio.
Valle del Cauca se disparó de 765 infectados el 24 de mayo a 1564 el 8 de junio.
Gráfico 3 El Covid-19 en el Valle del Cauca
Gráfico 4 El Covid-19 en Santander
Los muertos diarios pasaron la barrera de los 500
Los muertos a nivel nacional habían llegado a un máximo de 504 diarios el 18 de mayo, que bajaron a 498 el 28 de mayo, para subir de nuevo a 532 el 7 de junio. El 8 de junio fue un día extraño porque los muertos actuales cayeron de 535 a 427 y según promedio semanal de 532 a 518 (gráfico 5). Siempre hay un rezago con respecto a los infectados nacionales, por lo que en la medida que estos bajen se reflejará en los muertos.
La mayor parte de los muertos se concentran en Bogotá con un 18,8 por ciento para el 6 de junio, porcentaje menor al de su participación en casos diarios que era de 34,6 por ciento para este mismo día, porque la tasa de mortalidad de Bogotá es de 1,8 por ciento en comparación 2,57 por ciento para el nivel nacional., que bajó del 2,60 por ciento del 1 de junio. Bogotá tuvo un pico el 3 de junio con 131 muertos diarios según promedio semanal, que bajó a 119 el 6 de junio (gráfico 6).
Siguen en participación, Antioquia con 8,6 por ciento, Valle del Cauca con 8,2 por ciento, Santander y Córdoba con 7 por ciento cada uno. O sea, en cinco regiones se concentraba el 6 de junio el 49,6 por ciento de todos los muertos diarios
Gráfico 5 Evolución de los muertos a nivel nacional del 1 de abril al 8 de junio
Gráfico 6 Evolución de los muertos en Bogotá del 1 de abril al 6 de junio
Conclusiones
Pareciera que se llegó o se está llegando al pico de la tercera ola por lo que viene ocurriendo desde junio, especialmente de los días del 6 al 8 de junio.
Lo que suceda en Bogotá, definirá el pico nacional, adicional a los departamentos del Valle del Cauca, Santander, Antioquia y Cundinamarca.
Siguen las voces que achacan a las protestas los incrementos que se vienen dando desde el 23 de mayo. No hay ninguna base teórica ni empírica para que se pueda afirmar que esto es así.
Desde un punto de vista teórico, se conoce por los expertos en asuntos criminalísticos que protestas conducen a que mucha gente permanezca en sus hogares por miedo a incidentes de violencia de los manifestantes y de las fuerzas del orden. En cuanto a la pandemia, no son millones los que salen a las calles y sí muchos los que no van a trabajar y se quedan en sus, parques, hacen deporte o van a supermercados. Asimismo, los manifestantes lo hacen a cielo abierto donde hay excelente ventilación.
Empíricamente, las protestas comenzaron el 28 de abril. Así, así si se considera un período promedio de 10 días entre el contagio, su germinación y la definición de las pruebas, significa que a partir de 8 de mayo debería haberse dado un crecimiento en el número de los contagiados. Y esto no ocurrió, porque hasta el 22 de mayo los infectados cayeron.
El aumento de los contagios desde el 23 de mayo se restringe en unas pocas regiones. Bogotá ha sido fundamental en esto, ya que ha pasado de menos de 6000 casos diarios a casi 10 000, igual que Valle del Cauca, Santander y Antioquia. No es un fenómeno nacional sino muy concentrado.
Pero, si se confirma que el tercer pico se logró el 6 de junio, se habría tenido un período de solamente 14 días de haberse dado una nueva etapa de aumento en los infectados diarios, después del íco intermedio del 28 de abril.