Los hijos buenos y los hijos malos

Por ÉDGAR URUBURU*

Gran revuelo causó la detención de Nicolás Petro, hijo del presidente Petro y su exesposa Daysi Vásquez Castro, en un show organizado por el Fiscal Barbosa, entidad de justicia al servicio del uribismo.

Desde cuando tenemos memoria de la historia de Colombia, esta ha estado plagada de vinculaciones de hijos o familiares de presidentes, aprovechando su posición política y sus artimañas para su servicio y luego otros han tenido la suerte de que un acontecimiento les cambie la suerte y los convierta en personajes de alto calibre, como el caso de Andrés Pastrana, cuando en su momento fue secuestrado según dicen por orden de Pablo Escobar.

Luego como presidente está considerado como uno de los más ineptos y se ha comprobado su participación en las corrupciones de Chambacú y Dragol, y aunque él lo niega, muchos colombianos saben que los hermanos Rodríguez Orejuela no hablaban por hablar sino con conocimiento de causa. Tiene el mismo estilo de la mafia política encabezada por Álvaro Uribe en contra de Gustavo Petro, para de esta forma tratar de desacreditar todo lo que haga el gobierno actual e impedir que se conozca la verdad de todas las malas jugadas que los gobernantes corruptos le han hecho a los colombianos. (1)

Pastrana dejó bajo su presidencia la economía en pésimas condiciones, un acuerdo de paz fracasado (y había prometido “la Paz total”) dejó montones de desplazados, la cifra más alta de secuestros y de muertos por el conflicto y todo ese tipo de cosas, que podría analizarse como un terreno de preparación para su sucesor, Álvaro Uribe Vélez, quien tuvo así todo para ofrecer su famosa “seguridad democrática” y la creación de las Autodefensas Unidas de Colombia (2)

Aprovechando los tentáculos que rodean a “Matarife”, sus hijos Tomás y Jerónimo Alberto decidieron que lo suyo eran los negocios y así comenzaron a incursionar en varios tipos de actividades y organizaron una plataforma llamada “La Haus” para compra, renta de vivienda tanto en Colombia como México. Y es aquí donde está el asunto en nuestro país pues se conoce que con “cuentos” lograron comprar a precio de huevo, extensos terrenos en Mosquera, Cundinamarca y luego los llevaron a precios altísimos para que su negocio tuviera ganancias multimillonarias, pero como siempre, el tema nunca pasó a mayores y las cosas se quedaron a su favor. Los perdedores fueron los vendedores, ingenuos dueños de casas o terrenos de estratos bajos y máxime medios; que lo más seguro es que fueron engatusados que estaban haciendo un negocio normal y vendiendo a precios justos y más al creer y confiar que estaban negociando con nada menos que con los hijos de Álvaro Uribe Vélez. (3)

Y ahora justo ahora, antes de elecciones y de la celebración del primer año de gobierno tuvieron su “papayazo”, gracias a Nicolás Petro, quien al ser denunciado por su expareja Day Vásquez, por haber recibido 600 millones para la campaña de su padre y el Pacto Histórico y habérselos embolsillado sin que nadie supiera. La Fiscalía lo acusó de lavado de activos y enriquecimiento ilícito y a ella de enriquecimiento ilícito y violación de datos personales y de esa forma crear todo este show para desprestigiar a su padre, Gustavo Petro, el presidente de Colombia.  

Varios abogados penalistas de reconocida trayectoria, entre quienes se encuentra Miguel Ángel del Río, opinaron que no era necesaria la captura y se hubiera podido hacer la imputación de cargos sin encarcelamiento, pero horas después se reafirmó, aclarando que fue hecha por un juez y no por la Fiscalía. Pero con todo este show que se ha visto desde cuando Gustavo Petro asumió la presidencia y se ha propuesto combatir la corrupción que ha estado denunciando en el Congreso desde el 2010, se nota que los corruptos, mafiosos y paramilitares que están del lado de la derecha, quieren hacer lo que sea para evitar que sea descubierta su potente y extensa red, que tiene tentáculos a todo nivel: político, militar, judicial, social, empresarial y todo lo que sea necesario cubrir, máxime cuando el arma más poderosa son los Medios de Comunicación que saben el Poder que manejan para controlar las mentes de millones y millones de títeres.

Es tanto que una investigación mostrada en la página de la página “Colombia hoy” se refiere al caso de una noticia falsa (fake news) de Paloma Valencia y fue compartida más de 3 millones de veces, luego tuvo que rectificarla (y no lo hizo como debía porque hace sus trucos para engañar la visa de los lectores, apenas alcanzó 293.2), lo cual demuestra que la gente se queda con lo malo, le gusta, así como la guerra, los matarifes, los falsos positivos y todo lo relacionado. Igual hace María Fernanda Cabal y lógico, en muchas ocasiones respaldadas y publicadas por Vicky Dávila y la Revista Semana sin confirmar porque sólo les interesa engañar al pueblo. En el video (que aún permanece) la senadora de ultra derecha se atreve a hablar de resiliencia con el más absoluto descaro. (4)

Sería importante aquí que la Fundación para la Libertad de Prensa, Flip, pensara que, así como algunas EPSs tienen el eslogan “Derechos y Deberes”, se pensara que como verdaderos periodistas debemos pelear para que a los medios de comunicación se les llame la atención sobre quiénes no cumplen con difundir la verdad sino la calumnia y la mentira. Se deben crear políticas para que medios y periodistas que infringen las normas no sólo se les llame la atención, sino que sean denunciados y si es necesario sancionados. Las organizaciones periodísticas deben estar por encima de las organizaciones criminales y empresariales, propietarias de estos Medios. A futuro se debe tratar de reglamentar el dominio y control de la propiedad de cualquier tipo de Medios de comunicación. Que a futuro el país tenga un periodismo imparcial, verás y objetivo.

En la rama judicial está demostrado que hay un nivel de corrupción bastante elevado y sin escrúpulos. Los encargados de impartir justicia han llegado a niveles tan bajos que, como en el caso de “la fiscal de hierro”, Angélica Monsalve a sufrido todo tipo de atropellos por cumplir con su trabajo. Desde siempre se ha dicho que los abogados tienen fama de tramposos, y eso ahora parece ha ido creciendo a medida que los cargos van siendo de más alto nivel.

Por esto el exfiscal Néstor Humberto Martínez y el actual, Francisco Barbosa no han llegado a cumplir y hacer cumplir las Leyes sino a aterrorizar y amenazar a quienes quieren hacerlas cumplir. Y Pastrana y Uribe con sus vocecitas de dulces cachorros siempre atacan por lo bajo a Petro y se muestran como los santos (no como el Santos que inició el Proceso de paz) que todo lo han hecho perfectamente, pero no son más que lo contrario: demonios que enlodan la justicia del país.

Ojalá llegue el día en que todo cambie y aquellos que han desmoronado la política y la justicia colombiana y por ende vuelto añicos la calidad de vida de sus ciudadanos, quienes desafortunadamente, casi siempre están de parte de quienes les han usurpado, maltratado y violado todos sus Derechos y oportunidades para alcanzar cifras que conviertan al país en uno más desarrollado y tenga la bandera blanca de la paz total.

Conclusión: Nicolás Petro es el niño malo y máxime por el escándalo que organizó la Fiscalía mientras Tomás y Jerónimo Alberto son algunos de los niños buenos, porque nunca los juzgaron a pesar de conocerse sus vínculos con Odebrecht y el caso de la zona franca, acciones por las cuales debieron ser llamados a juicio. La causa principal es que el primero es hijo de Petro, quien siempre ha denunciado a los corruptos y los segundos del Matarife, del Narco 82, quien controla toda la corrupción y manipula a su antojo este país de marionetas. Sobre el tema de los mal llamados “delfines” y en general de los hijos de los políticos hay mucha tela por cortar.

Edgar Uruburu es Comunicador Social- periodista Universidad Los Libertadores. Locutor y director de programas de radio. Autor del libro de poemas «Sueños». Amante de la paz y el servicio social. Le gustan el dibujo, la pintura y la caricatura. 

@Culombianisimos

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