“El movimiento popular debe ganar más capacidad de decisión y poder en este gobierno”.
En la elección de la nueva fiscal general de la Nación, que debe ocurrir este jueves 8 de febrero en sala plena de la Corte Suprema, está en juego el futuro de la Colombia de los derechos sociales. Se trata de una cita crucial con la historia.
Nada refleja mejor la herencia del siniestro uribismo ultraderechista que la actual Fiscalía General y el monstruo que la encabeza, Francisco Barbosa, quien nada agrega en perversidad al exfiscal Néstor Humberto Martínez, el cerebro del entrampamiento judicial a Jesús Santrich y a la paz.
El actual Fiscal se erigió en el símbolo de la oposición cerril al gobierno del presidente Gustavo Petro y de sus profundas reformas sociales. La Fiscalía y la Procuraduría fueron escogida por el bloque reaccionario como el epicentro del golpismo y la sedición para debilitar y destruir al actual Gobierno.
Por fortuna, el grotesco y caprichoso desempeño de Barbosa parece haber dado al traste con el intento de golpe blando. Es tal su desatino, que parece que sus mentores en el establecimiento se le están corriendo, a pocos días de la salida de semejante alimaña de tan importante cargo para la rancia oligarquía colombiana.
En todo esto de la “ruptura institucional” le cabe un papel central al liderazgo del presidente Petro y su agudo olfato político.
Petro ha denunciado con contundencia, pertinencia y oportunidad política la conspiración ultraderechista, y ha proyectado las salidas correspondientes planteando un gran acuerdo nacional, proponiendo nuevas formas de organización política del pueblo, ajustando su entorno administrativo, excluyendo a los que estorban e indicando de manera certera que en la actual coyuntura “el movimiento popular debe ganar más capacidad de decisión y poder en este gobierno”.
Y ha agregado: “Un gobierno progresista no atacará la justicia, pero sí la impunidad. El progresismo es básicamente justicia, ciencia y poder popular. Por eso la situación actual no debe dirigirse como una presión a las Cortes”.
“La presidencia ha solicitado organizar las coordinadoras de fuerzas populares en cada municipio y departamento. Todo intento de golpe o violencia será respondido por la movilización popular general.
“Le solicito al magisterio ayudarnos a organizar las coordinaciones de fuerzas populares”
Más claro no canta un gallo.
El magisterio, atacado y perseguido por Barbosa, es el llamado a cumplir un papel protagónico en la batalla para que las fuerzas oscuras que hoy anidan dentro de la Corte Suprema de Justicia elijan a la nueva fiscal, cuyo trámite quieren bloquear con sucios pretextos.
@HoracioDuque8